«La oración es una condena de vida, siempre: muchos hombres y mujeres que rezan, siembran la vida»En este nuevo día, Mi amado Dios, te honro y bendigo tu nombre, te doy gracias por mi Vigor, te doy gracias por mi comunidad y te doy gracias por el trabajo que me permites realizar y disfrutar día a día.Confesar lo bueno que hay en nuestra vida